La nueva traición de los sindicatos

Por si fuera poco grande el cupo de traiciones que ya nos han endosado, ahora:

-El incremento salarial estará por debajo de la inflación con lo que las clases populares perderán poder adquisitivo. Solo se actualizarán décimas. Si por ejemplo el incremento del sueldo es el 0,5% y la inflacion supera el 2% y se pone en el 2,3%, sólo se incorporarán esas tres décimas al sueldo.

-El precio del petróleo también se toma como factor corrector (a la baja) para actualizar esas décimas. Es decir, si el precio del petróleo sube, se actualizarían menos de esas tres décimas en el ejemplo que hemos puesto. Todo esto sin que los sindicatos exijan como contrapartida la retirada de todas las guerras por el petróleo o la anulación del reciente acuerdo de la UE que nos hará perder el petróleo que importábamos de Irán.

-Una parte del salario será variable y ajustada a la productividad de la empresa (sin la contrapartida de que los trabajadores puedan decidir sobre la marcha de la misma).

-"Todas las rentas deben realizar un esfuerzo conjunto", dicen, subrayando también la necesidad de "adecuar" la retribución de altos directivos y ejecutivos. Sin embargo no se ven por ningún lado tasas fijas de inversión o topes definidos en los sueldos de los directivos, nada que obligue por escrito a los empresarios.

-Hasta un 10% de la jornada se podrá distribuir irregularmente. El empresario podrá disponer de una bolsa de 40 horas semanales al año que podrá alterar sobre la distribución prevista en el calendario anual. En ningún lado se dice que los empleados puedan tener esa flexibilidad para escoger días de trámites o arreglos personales urgentes.

-Se potencia la movilidad interna en la empresa, incluso la movilidad temporal para realizar funciones distintas a las del grupo profesional al que se pertenece en caso de que existan razones económicas, técnicas, organizativas o de producción que lo justifiquen.

-Los empresarios se podrán "descolgar" de pactos acerca de otras condiciones laborales, como el horario y la distribución de la jornada, el trabajo a turnos o el sistema de remuneración.

-Se fomenta la negociación de convenios de empresa para que sea en estos en los que se negocien las condiciones laborales más significativas.

¿Y ahora contra quien hacemos la manifestación convocada por los propios sindicatos para el 7 de Febrero en Madrid, contra el gobierno, contra los empresarios, contra la reforma laboral o contra los mismos sindicatos? Creo que deberíamos difundir todo esto.